Nota de prensa de la Plataforma en Defensa de la Sanidad Pública en Aranjuez

LA PLATAFORMA EN DEFENSA DE LA SANIDAD PÚBLICA DE ARANJUEZ, INDIGNADA ANTE  EJEMPLOS COMO EL DE MANUEL LAMELA

La Plataforma para la Defensa de la Sanidad Pública de Aranjuez quiere mostrar su indignación ante la noticia de que el antiguo Consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid Manuel Lamela es consejero de Assignia Infraestructuras, la empresa que gestiona el Hospital del Tajo y cuya concesión obtuvo cuando Lamela gestionaba el concurso para esa externalización. 

De esta forma, se refleja el criterio de lucro con el que muchos miembros del Gobierno Popular de la Comunidad de Madrid entienden la Sanidad Pública y se vuelve a poner al Hospital del Tajo en el centro del debate, no por las buenas prácticas gestoras o sanitarias sino por actitudes inmorales y alejadas de la preocupación por la salud pública, que debería presidir el código deontológico de los altos responsables políticos.

Además, todos recordamos el ensañamiento de Lamela con la labor como anestesistas de enfermos terminales de los Doctores Luis Montes y Miguel Ángel López que no sólo demostraron su inocencia sino que pusieron de manifiesto como el Gobierno presidido por Esperanza Aguirre anteponía criterios ideológicos al bienestar de la ciudadanía.

Esto es sólo un ejemplo más dentro de un largo proceso que se lleva gestando desde hace décadas. Su caso resulta parecido al de su sucesor en la Consejería de Salud Juan José Güemes, que tras su salida del Gobierno regional fue contratado como consejero por Unilabs, la empresa que acabó asumiendo la polémica adjudicación que de los servicios de análisis de seis hospitales del Sistema Público de Salud madrileño y sus centros de influencia. Adjudicación que diseñó y se otorgó, cómo no, bajo la gestión pública de Güemes. Al menos, este último presentó su dimisión como consejero de la citada empresa, cosa que esperamos que haga Lamela si quiere, realmente, seguir constando como una persona honorable de cara una futura carrera política o gestora en el sector de la sanidad privada. 

Ante las denuncias planteadas por diferentes actores sociales en todos estos años la respuesta de los conductores de todo este proceso privatizador era alegar alarmismo y demagogia, cuando estaba clara la estrategia oculta de desmantelamiento de un sistema público de salud con altos estándares de calidad para externalizarlo con empresas privadas, más preocupadas por lograr huecos en las agendas de los responsables de conducir este proceso que de lograr realmente un servicio eficiente y de calidad.

Por ello, no podemos más que reafirmarnos en nuestra posición de rechazo al actual plan privatizador del Gobierno regional y queremos mostrar las puertas abiertas a todo aquellos colectivos ciudadanos que, respetando los cauces democráticos, quieran unirse a nosotros para mostrar su repulsa ante todo lo que está ocurriendo.

El tiempo corre y la Plataforma para la Defensa de la Sanidad Pública quiere seguir manteniendo el pulso para denunciar este proceso privatizador y lograr frenarlo. Nos jugamos demasiado.