Desde el Frente Cívico de de Salamanca nos hacen llegar el siguiente comunicado:
Se trata de un acto previsto para el viernes pasado, con "Alfon", el
único encarcelado por la Huelga General. Los organizadores eran el CEA,
la asociación estudiantil mayoritaria (44 claustrales) de la Universidad
de Salamanca. Un grupo neonazi envió una queja a la prensa, la cual fue
enormemente amplificada (portada durante 3 días) de un medio de
comunicación, a su vez ligado al PP. El Rector de la USAL y el Decano de
Filosofía, tras esta publicidad negativa, y tal vez con la cabeza
puesta en las próximas elecciones universitarias, ha prohibido el acto
declarando que no consideran que "Alfon" tenga cualificación para hablar
en una Universidad.
Estamos impulsando un manifiesto que ya han
firmado Julio Anguita, Marcos Ana, Diego Cañamero, Ignacio Escolar,
Carlos Berzosa, Alfonso Sastre, Víctor Ríos, Juan Carlos Monedero, Pablo
Iglesias Turrión, Willy Toledo, Alberto San Juan, Manolo Monereo,
Javier Gallego (carne cruda), y más de 200 profesores universitarios de
todo el país, incluyendo 20 catedráticos, 5 de ellos de Salamanca.
Al
día siguiente de lanzar el manifiesto, algunos de los profesores
universitarios que firmábamos el manifiesto fuimos criminalizados por el
mismo diario local como "amigos de terroristas", lo que sólo nos ha
motivado a darle aún mayor difusión.
Manifiesto:
Los abajo
firmantes, personas vinculadas con el mundo académico y de la cultura,
no compartimos la decisión del Rectorado de la Universidad de Salamanca
de censurar la participación de Alfonso Fernández, el único encarcelado
por la Huelga General del pasado 14 de noviembre, en una charla-debate
prevista para el viernes 20 de marzo.
Creemos que la Universidad,
desde la Transición, es un espacio democrático para la libertad de
expresión y de discusión. Consideramos desafortunadas las palabras del
Rector Ruipérez, quien justificó la prohibición diciendo que “el ponente
no es el adecuado, una universidad pública debe elegir personas con
relevancia profesional y este joven no cumple ningún requisito".
Creemos
que la Universidad Pública no debe ceder al chantaje de la extrema
derecha, que es quien exigió al rector la censura del acto. En este
momento de agresión generalizada contra la Universidad Pública es
momento de hacer una defensa de los valores democráticos que
tradicionalmente han encontrado en el templo universitario su mejor
defensor.
Donde firmar:
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